La campaña “Sol Sin Riesgo” lleva 15 años divulgando y concienciando sobre la importancia de mantener unos buenos hábitos de fotoprotección
Desde hace 15 años, el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Zaragoza y la Asociación Española contra el Cáncer organizan los talleres “Sol Sin Riesgo”, una iniciativa que se expande por toda la provincia de Zaragoza para enseñar a los niños hábitos saludables de fotoprotección, con el objetivo de prevenir los efectos nocivos de las radiaciones solares y enfermedades como el cáncer de piel.
Un objetivo claro: educar en fotoprotección
El objetivo de esta veterana campaña es enseñar a los más pequeños la importancia de protegerse del sol y cómo hacerlo de manera adecuada. Miguel Montero, vocal de Dermofarmacia del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza, destaca que “la piel tiene memoria, por lo que la prevención durante la infancia condicionará las consecuencias a largo plazo”. La infancia es una etapa crucial, ya que la piel de los niños absorbe hasta tres veces más radiación que la de un adulto, lo que aumenta el riesgo de quemaduras solares, un factor importante en la aparición futura de melanomas.
José María Arnal presidente de la Asociación Española Contra el Cáncer en Zaragoza, incide en la importancia de la prevención solar: “Estamos trabajando junto al Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza para que los más pequeños adquieran hábitos saludables de cuidado ante el sol en su día a día”.
Farmacéuticos y voluntarios de la AECC imparten durante el verano más de 25 talleres infantiles en piscinas municipales»
Actividades lúdicas y educativas
A través de pasatiempos y juegos, los farmacéuticos y voluntarios de la Asociación explican a los niños la importancia de una fotoprotección adecuada. Los talleres culminarán con la entrega del carné “Protector del sol”, incentivando a los pequeños a mantener estos hábitos saludables.
El Colegio y la AECC han elaborado un decálogo del sol con recomendaciones esenciales para protegerse de los efectos dañinos de la radiación solar. Este decálogo incluye pautas como evitar la exposición solar en las horas de más calor (de 12 a 16 h.), usar camisetas, gorros y gafas de sol, y optar por fotoprotectores de factor 50 con antioxidantes.
Además, se aconseja aplicar el fotoprotector 30 minutos antes de la exposición, reaplicarlo cada 2 horas, y utilizar productos calmantes e hidratantes después del sol. También se destaca la importancia de limitar la exposición solar en niños menores de 3 años, embarazadas y ancianos, y mantener una adecuada hidratación. Por último, se recomienda consultar al farmacéutico sobre el fotoprotector más adecuado y sobre posibles interacciones con medicamentos.
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